Es increíble cómo son las cosas, cómo es la gente, cómo somos nosotros. En el blog de Dalamar leí algo muy interesante sobre el choque entre culturas.
Es una comparación real, sobre el terreno, tal y como lo vive Dalamar por tierras niponas; por cierto, mucha suerte por allí y no dejes de seguir contando cómo te va.
Lo más curioso fue reflexionar sobre lo que se veía allí, en Japón. Por ejemplo:
- Dormirse en reuniones o en el trabajo ¡¡¡¡estaba bien visto!!!! porque se entiende como respuesta a que se trabaja mucho para la empresa y eso es bueno.
- Allí después de terminar la carrera tienes que encontrar empleo, OBLIGACIÓN, porque sino eres mal visto (supongo como mal trabajador) y no es fácil encontrar más empleos. Es tan frustrante que algunos terminan suicidándose por la presión.
- El trabajo es una bendición para el individuo ya que te presenta ante la sociedad como un ser respetable y productivo.
En España.
- Hay que hacer como que se trabaja, tanto delante del jefe como de los compañeros, sea real o no. Además, si estás en el trabajo (y estás bien) tienes que quejarte continuamente del jefe, de los horarios y de los compañeros que no están presentes.
- Aquí da igual que te estés preparando o no porque la mayoría de las veces por parte de las empresas te contratan por un nivel inferior al que se tiene para cotizar menos. Por lo demás, se realiza una carrera no por pasión (normalmente se hace porque todo el mundo lo hace o por no trabajar) desaprovechando todas las posibilidades que ofrece el sistema educativo (es más barato que en otros países y da muchas oportunidades de acceso a la cultura) y por supuesto da como resultado muchos licenciados en la media hacia bajo.
- Aquí si se puede vivir del cuento y no pegar ni chapa, mejor.
En fin quizá, ninguna de las dos culturas tengamos la solución a nuestros problemas (ambas culturas tienen los suyos) pero seguro que podemos aprender mucho uno del otro.
Un saludo.
Es una comparación real, sobre el terreno, tal y como lo vive Dalamar por tierras niponas; por cierto, mucha suerte por allí y no dejes de seguir contando cómo te va.
Lo más curioso fue reflexionar sobre lo que se veía allí, en Japón. Por ejemplo:
- Dormirse en reuniones o en el trabajo ¡¡¡¡estaba bien visto!!!! porque se entiende como respuesta a que se trabaja mucho para la empresa y eso es bueno.
- Allí después de terminar la carrera tienes que encontrar empleo, OBLIGACIÓN, porque sino eres mal visto (supongo como mal trabajador) y no es fácil encontrar más empleos. Es tan frustrante que algunos terminan suicidándose por la presión.
- El trabajo es una bendición para el individuo ya que te presenta ante la sociedad como un ser respetable y productivo.
En España.
- Hay que hacer como que se trabaja, tanto delante del jefe como de los compañeros, sea real o no. Además, si estás en el trabajo (y estás bien) tienes que quejarte continuamente del jefe, de los horarios y de los compañeros que no están presentes.
- Aquí da igual que te estés preparando o no porque la mayoría de las veces por parte de las empresas te contratan por un nivel inferior al que se tiene para cotizar menos. Por lo demás, se realiza una carrera no por pasión (normalmente se hace porque todo el mundo lo hace o por no trabajar) desaprovechando todas las posibilidades que ofrece el sistema educativo (es más barato que en otros países y da muchas oportunidades de acceso a la cultura) y por supuesto da como resultado muchos licenciados en la media hacia bajo.
- Aquí si se puede vivir del cuento y no pegar ni chapa, mejor.
En fin quizá, ninguna de las dos culturas tengamos la solución a nuestros problemas (ambas culturas tienen los suyos) pero seguro que podemos aprender mucho uno del otro.
Un saludo.