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lunes, 21 de diciembre de 2015

Que la Fuerza te acompañe, joven padawan

"El miedo es el camino hacia el lado oscuro" 
Yoda a Luke Skywalker

Coincidiendo con el estreno de la nueva entrega de la saga Star Wars yo, como buen fan que soy, no podía resistirme a hacer una entrada con referencias claras a ella y así mostrar un poco mi lado freaky. Casualmente, la realidad no acompaña para mantenernos en el lado luminoso de la Fuerza y poder controlar nuestras emociones. En la bolsa esto es fundamental.

Si uno observa los principios del camino Jedi vemos que la idea subyacente es saber controlar nuestras emociones, no suprimirlas sino sentirlas y comprenderlas, poder fluir con la realidad. La realidad contiene demasiadas variables que no controlamos para hacer del libre albedrío una realidad (Caos) y dejando la física newtoniana de la causalidad en un cuento para niños. El Caos es una realidad, es nuestra realidad

Los recientes resultados electorales, la recesión de la que estamos saliendo, la incertidumbre, etc se puede resumir en un solo concepto: miedo. La idea básica que define la popular saga es que no podemos cambiar el futuro, quizá esté determinado, y cada uno de los protagonistas Jedi o Sith lo enfrentan de diferente manera. Unos aceptan la realidad, se mueven a su ritmo, y otros deciden actuar e intentar cambiarla con más o menos éxito, debo añadir. El resultado es que aquellos que se esfuerzan en cambiar la realidad en realidad estarán forzando el cumplimiento de aquel futuro que temen. Es la teoría de la profecía autocumplida. El miedo nos obligará la mayoría de las veces a sobreactuar y, como dice el dicho, solo el que tiene boca se equivoca.

La realidad es la que es, llevamos 8 años de recesión con sobresaltos cada 2 meses, los gestores partidarios de la gestión activa no suelen superar su benchmark con facilidad, la gestión pasiva (buy and hold) no es tampoco una garantía de éxito. ¿Qué hacer entonces? Solo necesitamos un lugar tranquilo, coger aire y ver la realidad con perspectiva. Ya lo dice Warren Baffett, la mayoría de gestores se equivocan porque hacen demasiado. No se trata de no hacer nada sino buscar hacer lo justo. Creo que el sr. Buffett es nuestro maestro Yoda particular y nos pide algo nada fácil de llevar a cabo.

Dejemos fluir la realidad y movámonos con ella, comprendamos nuestros miedos a las pérdidas, pero no nos dejemos llevar por ellas. Concéntrate en la realidad joven padawan y fluye.

martes, 8 de diciembre de 2015

Estrategia Comprar y Mantener, ¿funciona?

En el anterior post se demostró cómo una estrategia de Selección de Acciones no es tan determinante a la hora de invertir sino que lo realmente determinante (si la selección ha sido mediocre o desastrosa) es la gestión posterior pues hasta cualquier mono era capaz de hacer una cartera mejor que la de la mayoría de inversores profesionales. Realmente no es que no sea determinante (sí, lo es) pero es posible su corrección y reajuste durante el período de inversión.

Recalco que son conclusiones a las que fui llegando poco a poco con mi experiencia y ya aviso que no hay profesor más lento ni más caro (a veces) que ella.

Claro, una vez demostrado ésto en una cartera a largo plazo, por supuesto, grandes inversores como Warren Buffett han defendido la gestión pasiva o Comprar y Mantener (Buy and Hold, en inglés), pero ¿hasta qué punto es eficiente?

Por un lado, hay que tener en cuenta que la economía (y la bolsa es un reflejo de ello) suele tener una tendencia a los ciclos expansivos y recesivos. Por otro lado, también hay que tener en cuenta que no todas las empresas viven eternamente y, aprovechando los ciclos recesivos, simplemente pueden desaparecer. Cuando el Oso zarandea el árbol no todas las empresas permanecen en él. Esto es muy fácil testear con los históricos pero no lo es en la vida real.

Si solo comprásemos y mantuviésemos nuestro resultado no tendría mucho que envidiar al índice o benchmark (de ahí que algunos den más importancia a la selección que a la gestión). Por lo tanto, una estrategia de Comprar y Mantener pura tras una Selección aleatoria (el futuro es incierto para todos y cualquier criterio de selección puede resultar tan azaroso como cualquier otro) no tiene porqué reflejar una buena trayectoria, tal y como demostró Peter Garnry en el post publicado por Funds people. Todo dependerá de la suerte de nuestro mono interior porque, admitámoslo, hasta un mono como nosotros puede tener buena suerte.

Lo que debemos aplicar en este caso, tal y como dije en el anterior post, es una suerte de Selección Natural a los Valores en cartera, para seguir un poco con el símil del mono. Es decir, haremos Buy and Hold con las acciones en las que hayamos acertado y nos den beneficios y deberemos vender aquellas con las que no. La idea es cortar las pérdidas y que el valor promedio de la cartera (nuestra inversión) que no se vea lastrada por aquellas que se hunden. Lógico, ¿no?

Como podéis ver es un método que así expuesto resulta sencillo de seguir. En realidad dejo, voluntariamente, muchas preguntas en el aire para crear un verdadero método de inversión, ¿qué haríamos con las desinversiones? ¿volveríamos a invertir? ¿cuánto es una pérdida asumible que nos obligue a vender?¿qué criterio nos servirá para comprar?¿cuánto tiempo dura la cartera sin recoger beneficios? ¿me fijo solo en criterios macro, micro o en ambos? ¿funciona igual con una acción o cuánto es lo recomendable para la diversificación? ¿Stop loss sí o no?

Son preguntas que dejo sin respuesta no porque yo no las tenga (yo tengo las mías) sino para que cada uno se plantee sus propias respuestas. Crear un sistema de trading o de inversión es algo muy personal y debería desarrollarlo cada uno para sí mismo pues cada uno conoce (o debería conocer) su temperamento, el límite de sus conocimientos y los objetivos propios que desea alcanzar. Y, por último, el tiempo nos dirá qué tal lo vamos haciendo. Así de sencillo.

domingo, 6 de diciembre de 2015

La cartera del mono que bate al mercado

Experimentos como éstos se han realizado infinidad de veces, algunas veces por Universidades, otras por periódicos y otros por compañeros blogueros, desde el nacimiento de la Teoría del Paseo Aleatorio en los años 70 del siglo XX introducido en el análisis estadístico matemático por Karl Pearson mucho antes. La cartera del mono es algo que siempre se ha nombrado en la bolsa y que, nosotros como seres racionales que somos, hemos desdeñado como un simple pasatiempo pero la realidad es que ha batido a largo plazo a inversores profesionales (a la mayoría de ellos). ¿Qué tan buena cartera es una cartera aleatoria o una cartera del mono?

Para hacer las comprobaciones estadísticas pertinentes deberíamos escoger un mercado X y realizar la prueba. En un blog amigo (Slowinver.com de Gonzaga Giménez) se hizo el experimento con el SP500 (tan válido como cualquier otro) y los resultados sorprenden. Aunque en los comentarios se adolecían cierto defectos. También expliqué cómo hacer el experimento de forma estadística pero que cuyo esfuerzo supera con creces el de cualquier blog pero lo ideal sería proceder de esta manera. De otra manera, jugando con el azar, hasta un mono podría tener suerte.

La cartera del mono, experimento.

Si escogemos el SP500 como mercado a batir haríamos subconjuntos (carteras) de 10 acciones (sin poderar, con el mismo peso) y, por lo tanto, deberíamos hacer 50 carteras aleatorias diferentes, sin que en ninguna de ellas se repitiese ningún valor. Compararíamos, usando datos históricos, qué tal lo haría cada cartera en comparación con el índice (a pesar de que éste sí que tiene cierta ponderación). No contentos con esto, pues el azar nos puede hacer escoger unas carteras determinadas, por rigor estadístico deberíamos realizar todas las combinaciones posibles de 50 carteras de 10 acciones cada una. Con una muestra tan grande debería darnos, para un período dado, un histórico y qué tal rendimiento hacen cada muestra o cartera comparada con el SP500.

Sin hacer el experimento, y usando la lógica, lo más seguro es que obtengamos 3 tipos de resultados. Peor, similar (con un +-2% de margen con respecto al resultado del SP500) y mejor que el índice. Así que, sin realizar el experimento, ya tendríamos que al realizar una cartera del mono (aleatoria) tendríamos un 66% de posibilidades de obtener un rendimiento satisfactorio pues un rendimiento similar al índice es tan válido como batirlo (la honra queda intacta jejejeje). Habría resultados positivos (de beneficio), dentro del 33% que lo harían peor que el índice, que no serían satisfactorios por motivos obvios ya que tenemos en cuenta que el índice es nuestro Benchmark. Y esto usando la técnica de Buy&Hold tan denostada por los gestores profesionales, es decir, usando ninguna gestión de cartera.

Conclusiones

Por lo tanto, y como conclusión, encontramos que el método de entrada en el mercado no es tan importante (ni el momento) si nuestro objetivo es un largo plazo de, al menos, 10 o 15 años pues hasta la cartera de un mono puede batir al mercado. Lo que sí que vamos a observar que la gestión de la cartera es mucho más determinante, según ese y otro experimento realizado en otro blog (novatostradingclub.com de Uxío Fraga) que decidió hacerlo, pues la selección aleatoria no nos va evitar el escoger pufos, evidentemente, pero sí que la gestión activa puede ir desechando los valores perdedores y conservando los ganadores tal y como de una "selección natural" de la inversión se tratase. La gestión en ese último blog (novatostradingclub) fue tan positiva que consiguió ganar el concurso de trading en el que participaba, quedando número 1! Ahora, que cada uno saque sus propias conclusiones.