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lunes, 8 de agosto de 2011

Intentando encontrar un patrón al Caos III

"Neo, ¿crees que lo que estás respirando es aire?"

El Caos nunca ha estado más presente en la bolsa como en este ¿fallido? "lunes negro". Realmente, si lo pensamos bien, el Caos está en todas partes, en lo que comemos, en el aire, en todas partes. Nos impregna. Somos parte de él.

Un acto insignificante en una parte del mundo puede causar una catástrofe en la otra o suponer una increíble mejora (no hay que pecar de pesimista), como la de aquel chico que consiguió cambiar un clip rojo por una casa (podéis ver el recorrido en el enlace anterior) yo fuí de los que no se lo creían, y me tuve que tragar mis palabras. ¿Es posible que el Caos se pueda controlar?¿es posible tan siquiera intentar encontrar un patrón al Caos?

Muchos lo intentan (intentamos) con mayor o peor fortuna, pero el resultado es muy diverso ya que, como he comentado en anteriores post, el Caos es predecible hasta... hasta que ya no lo es.

Concretamente, en lo que se refiere a la bolsa de valores, encontramos dos teorías contrapuestas, irreconciliables diría yo, entre los que aceptan la aleatoriedad de la misma y los que, atendiendo a situaciones pasadas, creen que pueden predecir el futuro.

Entre los primeros están los que creen que es imposible predecir el futuro pero que, igual que hay subidas de mercado, hay bajadas. Que el acierto en la selección de valores es similar la del mejor analista que la del mejor mono, sea un mito o no, ha dejado mucha huella en el amor propio. Son las teorías de Burton G. Malkiel y su paso aleatorio por Wall Street. El libro lo recomiendo a los que no lo han leído.

Éste autor alienta por una cartera bien diversificada y, como cree que batir al índice es imposible y menos de forma sistemática (entre otras cosas porque sino la bolsa ya no sería un sistema inestable), lo que recomienda es replicarlo, es decir, construir una cartera de inversión con la misma ponderación y composición que un índice bursátil (en nuestro caso, el Ibex 35).

Nada de análisis, nada de magia, si no puedes con tu enemigo, únete a él.

Entre los segundos, bueno, tenemos de todo pero aviso que vamos a entrar en el oscuro mundo de los analistas. Éstos creen que se puede recopilar la información suficiente y se puede predecir los movimientos del mercado para batirlo sistemáticamente. Quizá no todas las veces, pero sí las suficientes.

Entre los analistas podemos encontrar a los analistas fundamentales. Recogen todo tipo de datos contables generados por la empresa en su labor diaria (datos endógenos) así como datos del mercado en su sector, en el mercado nacional y, por último, en el mercado internacional (datos exógenos). Difícilmente una empresa irá bien si el mercado (sector, nación o situación internacional) no anda muy allá. Vaya, esto último no sé por qué me suena de algo.

Tras la realización de esos análisis ya saben cómo está la situación y, ahora, se trata de esperar expectativas de la empresa en cuestión en un futuro, más o menos, cercano, pero no inmediato (las malas noticias al igual que las buenas terminarán pasando).

Aunque tiene cierta aceptación entre los académicos y economistas (suele ser considerado como de "la vieja escuela") sus resultados van a depender tanto del posible buen acierto del analista como del libre albedrío (¿y si el mundo se acaba mañana?). De los tipos de análisis es el que más paciencia requiere y, aunque sea yo el que lo diga y suene mal, cierta fe en el sistema.

No es un sistema de análisis comprobable en la actualidad, en el corto plazo, sólo con datos del pasado y no sabemos si funcionará igualmente en el futuro. El mismo Graham (padre de la inversión en valor, rama del análisis fundamental) reconoció que su sistema funcionó durante sus últimos 40 años pero que no creía que pudiese funcionar en el futuro.

Otro grupo de analistas son los analistas técnicos. Surgida su fama de este tipo de análisis con el masivo uso de computadoras a partir de los años 80, pero está vigente desde mucho antes, varias teorías justifican su validez (para mí, todas igual de válidas) pero de las que podemos destacar aquella que defiende la que en el precio se encuentra toda la información disponible. ¿Toda?

Según esta teoría los precios son influenciables por todo (el Caos está presente y se acepta) tanto por la información endógena, alguna de la cuál es inaccesible para los inversores que no posee información privilegiada y quizá sea la que más influye, y la situación política, económica y social del mundo que nos rodea, información exógena. Toda esta información mueve el mercado (los precios) y, con un seguimiento pormenorizado de los gráficos, podemos interpretar lo que pasa y, quizá, lo que pasará. Para ello utilizan los gráficos de los precios de los valores a analizar y se puede comprobar en más en el corto plazo.

Decididamente tampoco quiero dejar de lado todos aquellos analistas que, de una forma u otra, pretenden predecir los movimientos de los mercados (ciclos lunares, tarot, matemáticos con el número pi, números mágicos, etc) ya que todo lo que pueda predecir al ser humano puede predecir sus actos y, entre esos actos, está la bolsa de valores. Son éstos últimos más curiosos pero, sinceramente, si a alguien le funciona alguno de ellos solo puedo decir una cosa: adelante.

El Caos nos guía y mi recomendación es muy sencilla al respecto.

Espero que, uses el sistema que uses, sólo espero que disfrutes del camino porque nada hay más importante que la vida. De nuevo no me decanto por ningún sistema en concreto (siento si mi post ha reflejado alguna preferencia, ha sido involuntaria).

Que, ¿qué sistema uso yo? Bueno, creo que eso lo comentaré en el siguiente post.

Un saludo.

2 comentarios:

  1. Intento interesante ya que el caos es caos por no tener patron...

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  2. Mitchell Feigenbaum encontró que aún en casos caóticos se podría encontrar una razón específica de la misma y, ciertamente, predecir su posible dirección.

    El caos, en algunos casos, se puede predecir: enlace

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